VENGAN A VER
LO QUE NO QUIEREN VER
Vengan a ver,
los que viven sin ver,
vengan a ver,
la luz de mi calle
que no se ve…
VENGAN A VER
LO QUE NO QUIEREN VER
Vengan a ver,
el palacio irreal
que inauguramos ayer
con alfombras de barro
y tapices de papel,
a la luz de la una,
a la luz de la luna,
a la luz de las dos,
a la luna de las tres.
VENGAN A VER
LO QUE NO QUIEREN VER
Vengan a ver,
los jardines y los parques
que podríamos tener.
Vengan a ver.
Vengan de una vez.
Vengan de uno en uno.
Vengan desarmados.
Vengan, atrévanse.
No traigan sus perros.
Venga, no amenacen.
Miren, mejor no vengan.
Venga, váyanse.
Venga piérdanse.
Venga, muéranse.
Está canción que Luis Pastor dedicó a su barrio, Vallecas, en 1975, sigue vigente en la actualidad y en este caso es en el barrio donde crecí, nací y gracias a ese barrio soy lo que soy, San Cristóbal de los Ángeles. Siempre lo llevo en mi corazón con orgullo de pertenencia porque allí es donde conocí a mi gente y seguimos haciendo camino al andar. Las políticas de capitalismo salvaje han dejado el barrio en una situación delicada por querer dejarlo como un guetto de las afueras de la gran ciudad, pero yo me niego a dejar mi barrio de lado por mucho que ellos no quieran que exista. Tiene vida, tiene esperanza y tiene futuro.
COME see it who do not want toSEE, Come to see, who live without seeing, come to see the light of my calleque is not... COME to see it who do not want to see. Come to see the Palace irrealque opened yesterday with local carpets tapestries of paper, in the light of the one, in the light of the Moon, in the light of the two, the Moon of the three. COME to see it who do not want to see, come to see the gardens and the park that could have. Come and see. Come at once. Come one by one. Come unarmed. Come, daring. Do not bring your dogs. Come, do not threaten. Look, better not come. Come, go. Come get lost. Come, die.
It is song that Luis Pastor dedicated to his neighborhood, Vallecas, in 1975, still existing today and in this case is in the neighborhood where I grew up, I was born and I am what I am thanks to this neighborhood, San Cristobal de los Angeles. I always carry it in my heart with pride of belonging because that is where I met my people and we are still making way walking. Wild capitalism policies have left the neighborhood in a delicate situation for wanting to leave it as a ghetto of the outskirts of the big city, but I I refuse to let my neighborhood's side as much as they do not want that there is. It has life, hope and has future.
Pablo García
San Cristobal de los Ángeles. Noviembre 2015.